Guía para la limpieza de suelos laminados

Guía profesional para la limpieza de suelos laminados

Una limpieza eficaz de los suelos laminados requiere un enfoque sistemático, priorizando la protección de su integridad. Los laminados tienen núcleos de aglomerado. Si el agua se filtra por las juntas, estos se expandirán y deformarán. Por lo tanto, en cada paso, se debe minimizar al máximo la exposición al agua.

La siguiente es una solución de limpieza profesional:

1. Prevención y limpieza en seco (diaria/frecuente)

Objetivo: Eliminar partículas abrasivas y polvo que puedan rayar la superficie.

Método de uso: Utilice una mopa de microfibra o una aspiradora con cepillo suave o en modo para suelos duros. Es fundamental asegurarse de que la varilla de calentamiento de la aspiradora (cepillo giratorio) esté apagada. Esto puede evitar pequeños arañazos.

2. Limpieza de humedales (semanalmente/según sea necesario)

Objetivo: Eliminar manchas, suciedad pegajosa y suciedad ligera.

La regla de oro: Hay que escurrir bien la fregona para que no queden marcas ni agua estancada y esta se evapore en pocos minutos.

Herramientas: Las mopas con pulverizador (por ejemplo, Swiffer WetJet o similares) son herramientas recomendadas por profesionales debido a su excelente capacidad para controlar la humedad. Una mopa de microfibra bien retorcida sería ideal.

Solución limpiadora

Práctica recomendada: Use el limpiador para pisos laminados recomendado por el fabricante. Todos estos limpiadores están especialmente diseñados para no dejar pasivación ni residuos pegajosos.

Advertencia profesional: Nunca utilice limpiadores a base de jabón, abrasivos, ceras, pulimentos ni mopas a vapor. El jabón dejará una película opaca, el vapor deformará la tabla de madera y anulará la garantía, y la cera volverá el suelo resbaladizo hasta un punto peligroso.

3. Eliminar las manchas (inmediatamente)

Para manchas generales (comida, suciedad): Raspe suavemente con una espátula de plástico. Humedezca un paño con agua tibia o un limpiador especial para laminados y limpie la zona. Seque inmediatamente con un paño limpio y seco.

Manchas difíciles (grasa, alquitrán, tinta): Use un paño humedecido con una pequeña cantidad de alcohol isopropílico (alcohol para uso externo) o quitaesmalte sin acetona. Estos disolventes se evaporan rápidamente sin añadir agua. Pruebe siempre primero en un lugar discreto.

4. Mantenimiento preventivo

Coloque tapetes para caminar en todas las entradas para evitar la entrada de polvo y humedad.

Utilice almohadillas de fieltro debajo de las patas de los muebles.

Limpie inmediatamente las sustancias derramadas y los accidentes de las mascotas.